En la actualidad, multitud de aparatos y dispositivos continúan utilizando pilas AA para funcionar, como los ratones o los teclados inalámbricos, algunas cámaras fotográficas o mandos a distancia y controles remotos, entre otros ejemplos.
Si habitualmente utilizas este tipo de baterías y te gustaría emplear una alternativa más ecológica y respetuosa con el medio ambiente, tienes a tu disposición AquaCell, un curioso tipo de pilas que se pueden recargar con agua en tan solo cinco minutos.
De acuerdo con sus desarrolladores, AquaCell ofrece las mismas funciones que las pilas alcalinas convencionales, pero con la ventaja de que no son tóxicas y que se pueden recargar en cualquier lugar sin necesidad de corriente eléctrica.
Cada pila está compuesta por varillas de carbono que condensan y conducen la corriente a la tapa positiva, un cátodo fabricado con una lámina de zinc de alta pureza y polvo reactivo para el electrolito hecho de una sustancia natural sin materiales alcalinos. Una capa de papel es la encargada de separar el electrodo positivo del polvo reactivo, por lo que al mojarse se empieza a conducir la corriente.
Antes de comenzar a utilizar las pilas ecológicas, es necesario activarlas retirando la tapa posterior y sumergiéndolas en agua durante cinco minutos en la bolsa de activación. Después, se coloca de nuevo la tapa y se secan completamente, y ya están listas para introducirlas en cualquier dispositivo. La duración que proporcionan es similar a la de cualquier pila AA.
Una vez que han sido activadas, es posible volver a cargarlas hasta diez veces sumergiéndolas en agua. La primera carga de es unos 1.000 mA, aunque con el uso irá perdiendo un poco de capacidad.
El fabricante AquaCell ha confiado en el crowdfunding para hacer realidad su invento, por lo que las pilas ecológicas se pueden adquirir en la página de Indiegogo de la campaña a un precio desde 15 dólares el paquete de dos pilas.
(Tomado de computerhoy.com)